Gozar a solas o en pareja no solamente tiene consecuencias ventajosas para el cuerpo, sino también para el bienestar. Disfrutar del sexo es salud: aumenta la circulación sanguínea, ayuda a mantener los órganos saludables y disminuye los nervios y la tensión.
Pero ¿qué sucede cuando dejamos de tener sexo? Sea por rutina, depresión, estrés, alguna enfermedad o falta de ganas, te contamos qué le pasa a tu organismo ante la falta de sexo.
– Aumenta la ansiedad y el estrés
Al tener sexo, se alivian tensiones y se liberan los nervios. Al no hacerlo, eso queda concentrado en el organismo y genera ansiedad.
– Mayor angustia
Las relaciones sexuales no solamente involucran esfuerzo físico, sino que también producen sensaciones de bienestar y tranquilidad. Por eso, cuando no se tiene sexo, suelen aparecer broncas y tristezas.
– Afecta la piel
Al no liberar impurezas, la piel se verá con menos luz y más deshidratada.
– Más susceptibilidad a enfermedades
El sexo ayuda al organismo a estar en su óptimo funcionamiento. Ante su falta, bajan las defensas, lo que puede causar resfríos, alergias y gripes.
Por eso es fundamental mantener el fuego prendido y disfrutar tanto a solas como en pareja. Jugá con juguetes sexuales o geles íntimos como MultiO para revivir las ganas. Gozá con películas o en una situación romántica. Siempre hay momentos para el sexo: es hora de ponerlo como una de las prioridades en la vida.
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